miércoles, 2 de diciembre de 2009

misivas de conflicto

"Querido Charly:
Te escribo porque creo que esta tarde, en el arrozal, te has excedido un poco. Entiendo que te sientas fastidiado por el hecho de querer matarte. Comprendo que lo mismo estás un poco mosqueado por esta costumbre nuestra de ir quemándote los poblados, arrasando cosechas, animales, mujeres y algún que otro paisano, por confusión. Son cosas que entran dentro de lo comprensible.
Que nos vayámos escondiendo por la selva, y ahora me emboscas tú, que si ahora te pongo yo unas minillas por allá, que sí te disparo, me disparas, te apuñalo, te apedreo... tiene su aquél, lógico y loable por más que a veces pierda encanto y es normal que a veces hasta nos pierda la boca, tanto a tí como a mí, que en eso somos todos culpables.
Por todo eso, me parece normal que a veces te aflore esa mala leche tan tuya, pero lo que no me parece nada normal y bastante feo por tu parte es que te dispare hasta tres veces por la espalda y ni te dignes a girarte ni tan siquiera para decirme hola. Hubiese preferido tres interrogatorios seguidos a tener que toparme con esa tu indiferencia. Fuiste más allá. Y ahora espero que reflexiones sobre lo que te he dicho y no haya una próxima vez.
Enguerradamente tuyo,

Lt. Smith"

sábado, 21 de noviembre de 2009

I

Lo enterraron y aún así, volvió. Al resucitar se dió con la tapa del ataúd, le dolió bastante y aprendió una lección que nunca olvidaría en su nueva vida; no hay que levantarse precipitadamente cuando estás en un ataúd cerrado, si está abierto, en principio no ha de haber problemas.
El golpe partió la tapa. Nunca antes se había dado cuenta de que proceder de un círculo en el que no hay apenas dinero podía ser una ventaja. Un punto más subió al marcador de la alegría cuando vió a través de la brecha que había resucitado justo antes de que el enterrador empezara a echar arena en el hoyo. Hoyo que por cierto no fué en vano, ya que al verlo salir del ataúd, el enterrador opositó con éxito para ocupar su lugar... habría que comprarle otro pijama de madera, o cuanto menos otra tapa, pero la faena ya estaba hecha.
Una vez puesto en pié, y no sin antes trepar por el conciencudo hoyo ( prueba inequívoca de la buena realización del mismo), se puso a pensar cual sería su siguiente paso. No era como para tomárselo a la ligera; ¿primero el pie izquierdo o el derecho?

domingo, 25 de octubre de 2009

Bocata de aún

Aún no ha acabado la canción y me pregunto si tú sabrias pronunciar mi nombre, ya no en el cielo, si no si me volvieses a ver, si tú sabrias entonces tan sólo sonreir.
Como aquél gato que casi llegó al otro lado, quizás no fue una buena idea, pero no se le puede culpar por haberlo intentado. Como aquél gato que dejó de ser gato y como aquél otro que lo sigue siendo con una idea no mucho mejor, pero al que no se le puede culpar por haberlo conseguido.
Aún no ha acabado la canción y me pregunto si tú sabrias pronunciar mi nombre, ya no hoy, si no si mi nombre fuese un nombre de ayer, si tú sabrias tan sólo sonreir.
Como aquél momento que casi llegó a ser un recuerdo, quizás no fue el mejor de todos, pero no se le puede culpar por haber pasado. Como aquél momento que casi llegó a ser un recuerdo y como aquél otro que sí se recuerda, que quizás no fue el mejor de todos, pero al que no se le puede culpar por seguir presente.
Aún no ha acabado la canción y me pregunto si tú sabrias pronunciar mi nombre, ya no con palabras, si no contigo, si tú sabrias entonces tan sólo sonreir.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Porque's y otros

Sintetizando un poco bastante, la vida a cada momento te brinda la oportunidad de llegar a vivir bien a costa de dos opciones a escoger... y yo me niego a seguir pensando si la otra era la buena.

Porque me ponga como me ponga, estoy donde estoy.
Porque haga lo que haga, al fin y al cabo, lo hago yo.
Porque lo que queda es el camino.
Porque lo que importa al menos a mí me importa.
Porque hay motivos, tantos como colores.

Porque esta ha sido mi elección.

Sintetizando un poco bastante, la vida a cada momento te brinda la oportunidad de llegar a vivir bien a costa de dos opciones a escoger... y yo me niego a imaginar siquiera lo que hubiese pasado si escojo la otra.

lunes, 21 de septiembre de 2009

thing called love

Encontrado cachorro en buen estado. No atiende a ningún nombre por ser sordo, por lo demás es un cachorro al uso.

07:15 A.M.
(En la puerta de la nevera)

Cariño:
Hay flan casero hecho, encontrarás el caramelo justo debajo.
También hay olivas rellenas, están dentro del bote que tiene dibujadas unas olivas (no te preocupes cuando lo abras...no es una granada)
Si no ves de algo que te apetezca, no te preocupes, posiblemente es que no haya. Si te apetezco y no me ves, no es que no haya de mí, es que no estoy.
Nos vemos esta noche.

08:34 P.M
(En la puerta de casa)

Cielo:
Hay humor casero hecho, encontrarás la gracia justo al final de tu espalda.
También hay ropa doblada, está dentro de la maleta que se coje cuando te trasladas (no te preocupes en abrirla... es toda tuya)
Si no puedes abrir la puerta, no te preocupes, posiblemente no la vas a poder abrir. Si te apetezco y no me ves, no es que no esté, es que yo estaré dentro.
Desde esta noche, ya no nos vemos.


Se busca cachorro perdido en un descuido.

martes, 4 de agosto de 2009

no me quites pan

Otra vez no, no vuelvas, he tenido demasiado tiempo para echarte de menos. Demasiado tiempo para pensar. Demasiado tiempo como para ignorarlo. No vuelvas.

He ahogado todas las preguntas y las respuestas no saldrán a flote, yo me he asegurado de eso y tú lo has hecho posible. En serio, no vuelvas.

Deja que no exista nada más, deja que sea así. No intentes devolver nada que ya no te pertenece, no lo intentes... no vuelvas.

Sigue, al igual que yo seguiré, y que sea todo tan barato como se ha tasado. Olvídate de dejar propina, de descuidarte el cambio en la bandeja, de intentar pagar la ronda, de gastarte dinero. Olvídate de lo que vale, porque no vale y, sobre todo, no vuelvas.

Otra vez no, no vuelvas, vuela. He tenido demasiado tiempo para echarte de menos, demasiado tiempo para pensar... demasiado tiempo como para ignorarlo. No vuelvas, vuela.

martes, 14 de julio de 2009

no sin antes hacer mención...

Supongo que era la primera vez que me fijaba. Tu expresión, con esa media sonrisa y los ojos medio abiertos, casi entornados, mirándome divertida mientras me acababa de vestir. Me sentía grande, feliz..aún a sabiendas de que no volvería a verte así más. Y mientras me acercaba a despedirme, tú seguiste con esa cara que poco a poco se grababa para siempre en mi memoria. Un beso en esa mejilla que tenias tan sonrojada y caliente selló un momento privilegiado. Ya no quise ni girarme para volverte a ver así por última vez, cogí mis cosas y cerré tras de mi la puerta lo más suave que pude.
Apenas cinco horas después de todo aquello estaba sentado en un inmenso comedor blanco, frío y abarrotado de gente que se me antojaba aún más fría. Justo enfrente tenía a uno de los veteranos, a saber cuantos años y cuantas historias podía explicar ese personaje medio arrugado que daba cuenta del plato como si fuese el último de su vida. Lo observé durante un buen rato y me hice una idea de quién y como podría ser ese hombre; alistado por no tener otra cosa mejor, deshinibido de todo valor ético, que no moral, había llegado a hacer las cosas de manera tan natural que daría la sensación de estar por encima de todo lo que le rodease y tanto le daba que fuese ahora o dentro de un momento, si había que marcharse, se iba, si se tenía que acabar, pues se acababa, y punto.
No había empezado a tomarme el café de calcetín que en mi cabeza se antojaba muy lejano el olor de las sábanas, y sin dejar de observar todo lo disimuladamente que podía al personaje que tenía enfrente, me di cuenta de que no quería acabar así, de que yo me merecía un algo más, pero que al fin y al cabo, apenas un instante me separaba amí y al resto de la gente de ese comedor, del personaje arrugado.

domingo, 21 de junio de 2009

pa relleno un botón

De llegar y tener la mesa servida para un comensal, me llama más la atención tener que merendar así que el echo de que sólo se espere a una persona; a mí.
El comedor está vacío, pero alguien se ha tomado las molestias de dejarlo todo preparado. ¿A qué se deberá? Personalmente no tenía pensado comer nada a estas horas, tampoco esperaba que nadie se preocupara de eso, la verdad, pero bueno, hay un plato puesto, una silla que invita a sentarse a la mesa y una nota en la que pone mi nombre. Esi sí,no hay vaso ni botella, pero bueno, lo mismo es un despiste... De todas formas, no sería educado hacerse el sueco, hay alguien que quiere que meriende sentado.
Pues nada, curioso y abnegado que es uno, me siento a la mesa. Lo que hay en el plato es raro, no sabría decir que és visualmente. No hay vaso, ni botella alguna. ¿Será un despiste o una señal de que lo que me espera tengo que comérmelo sin nada que beber?. Huele a algo familiar, pero no alcanzo a ponerle nombre. Cojo el tenedor, pincho un poco y me lo meto en la boca, a ver que pasa...
Mastico poco a poco y saboreo. ¡Ya sé que és!
Alguien me ha puesto la mesa para merendar y ha escogido por mi el menú. Y se quién ha sido. El sabor del plato es inconfudible: son palabras, las palabras que tenia para esa persona, que ha decidido que me las coma sólo, sin nada más para pasar el trago que mi propia saliva.
Es todo un detalle, pero me parece que se le han colado unas cuantas que no entraban es su menú. Me las comeré igual porque, como decía, no sería educado por mi parte. Si puedo le dejaré una nota de agradecimiento. No puedo decir si el sabor es agradable o no, pero juraría que esta es una merienda de dos...

sábado, 20 de junio de 2009

Amaneceres bobos

De cuando llega un punto que dices que hasta aquí puedes leer. De cuando consideras desde dentro, desde muy adentro, que ya es suficiente. Y dime si es mentira que aún así te creeré, pero sólo hoy, sólo porque hasta aquí puedo leer, que ya es suficiente.
Hay cosas que se consideran injustas, aún teniendo el beneficio de la duda de si se está siendo razonable...esto es injusto. Es injusto para mí, y ahora ya me trae sin cuidado una segunda opinión, no he llegado hasta aquí para que me importe, sobretodo porque yo no quería estar aquí, vine obligado y obligado me tengo que ir. ¿Ves como no es justo?.
De cuando a tus palabras las vuelven balbuceos. De cuando a tus gestas las retuercen hasta que se convierten en payasadas. Y dime si es mentira que aún así te creeré, pero sólo hoy, sólo porque balbuceo y hago el payaso.
Corre. Corre y no pares hasta que te desmayes, coge aire y sigue corriendo. No te aseguro que estés entonces lo suficientemente lejos, ni tampoco de que esta vez pueda evitarte el encontronazo que tan bien se te ha dado provocar; es más, yo de tí no apostaría por la suerte, hoy el plato del día son consecuencias caseras. Mástícalas despacio, que tienen mucha espina. Es un consejo de la Dirección General de Encabritados y la asociación "Don't touch my brails".
Ah! y el cortado lo pedí con la leche natural, NA-TU-RAL.

jueves, 18 de junio de 2009

un título por haberlo

Tres patas tiene el gato,
que yo las encontré.
A mi espalda cargo el rato,
el del astío y el del olé.

Si el mando no tiene pilas,
si las cortinas ya no son lilas,
si por ello no sabes qué pasa,
a saber si erraste al entrar en casa.

Que me duele lo dolido
porque el dolor ha de estar.
¿Y no es bien lógico el pensar
estar alegre que jodido?

sábado, 23 de mayo de 2009

ayer

No hay nada de lo que extrañarse, pero no estoy loco. Tantas veces me mires, tantas personas en mí verás, y no dejaré nunca de ser yo. Se lo que piensas y te equivocas... no soy yo quien ve tantas personas, eres tú quien no me ve a mí.

-Dime que no soy fruto de mi camino si puedes.
-No, no puedo.
-O dime si no tiene su lógica entonces que sepa pintar en blanco y negro.
-Nadie se da cuenta de cuando pintas y de cuando no.
-¿Todavía piensas que eso es lo que me importa?
-Tiene toda la pinta que así es...
-Puedo hacer muchas cosas, y considero que debo de hacer otras tantas.
-Vas a reventar tarde o temprano.
-Ayer alguién lloro de alegría al verme. Su mirada me quitó la vida y me la devolvió como pocas veces la he sentido.
-No le veo relación con lo que estamos hablando.
-De ahí que me cuestiones, pero lo que pasó ayer es suficiente para que siga siendo sordo.

Nadie me ha obligado nunca a hacer lo que hago, es una decisión propia. No hay mentiras ni verdades, no hay culpabilidades ni agradecimientos, no hay aciertos ni errores, no hay nada que no tenga que haber, no hay nada que en parte no haya decidido yo por mucho que se me escapen infinitos detalles.

martes, 28 de abril de 2009

madruga es tu druga

Y es Saturno, en su faceta más astrológica, el que ha de calmarme, pues por mí mismo no logro hacerlo. Acción reacción que no desespera pero tampoco satisface.
Clamo justicia casi por instinto, pues cuando te abandona el temple, a mi parecer, le robas toda credibilidad a tus argumentos, la tengan estos o no. Y poco más que añadir si ha llovido tanto.

He caido en la trampa de mi propia filosofía, y ahora sólo puedo aferrarme al ego de la constancia de mis actos. No reconoceré a ningún dedo acusador, ni asumiré etiqueta alguna por estos hechos, pero que quede bien claro que se reconocer el sabor de boca que estos me dejan y la impotencia de no poder usar el verbo para defenderme. Condeno la cada vez más cercana conversación que se avecina. La condeno con antelación por la mentira, el cinismo y el sin sentido que va a tener.

Como decía, no me queda otra que confiar en la labor del Saturno astrológico, resumir todas mis vísceras en un profundo y personal sentimiento y asumir que no te va a salir del coño reconocer que has dejado un tetabrick de leche vacío refrescándose en la nevera.

domingo, 19 de abril de 2009

Por poder...

- ...y soy lesbiana
- Perfecto, ya tenemos algo en común, nos gustan las mismas cosas
No puedes lanzar una granada y pretender que explote si no le has quitado el seguro, por mucho que hayas contado hasta diez. Por otra parte, tampoco te va a llevar a ningún lado.
- ¿Me guardas un secreto?
-...
- En verdad, me encantan los hombres
- ¿Como ese que tienes al lado y al que le estás dando el quiebro hablando conmigo?
No puedes apretar unos pechos "empecinados" contra una espalda, por mucho que cuentes con beneplácito. Por otra parte, tampoco te va a llevar a ningún lado.
- Hueles bien
- Y sepo mejor
No puedes jugar mostrando todas las cartas, por muy buenas que estas sean. Por otra parte, tampoco te va a llevar a ningún lado.
- He pensado que...
Y ahí ya... Siendo sinceros, claro que puedes tirar granadas que no exploten, estampar unos pechos activos contra una espalda frotándolos a ritmo de rock y más que claro está que puedes jugar con tus mejores cartas y enseñarlas. Claro que sí,¡faltaría más!. Pero a todas estas no pretendas que luego quede verosímil que piensas porque, por otra parte, tampoco te va a llevar a ningún lado.

miércoles, 8 de abril de 2009

No pude pensar en otra cosa...

Ya había tomado la decisión y mis puños ya estaban lo suficientemente entumecidos como para seguir golpeándole hasta el infinito... y luego un poco más. Mis gesto se convirtieron en mecánicos; acompasé mi respiración con el va y ven de martillazos. Dejó pronto de importarme la efectividad, porque dejó pronto de importarle a él también; aun así, no paré ni disminuí la potencia de los golpes, es más, creo que cada vez pegaba más fuerte. No recuerdo ni cuando ni como paré, pero para cuando noté que todo había acabado, ya me habían llevado lejos. No pude pensar en otra cosa.

Tenía tu cara en mente... desde que colgué el teléfono, desde que no pude decirte nada, desde que tomé la decisión. Sabía perfectamente lo que significaba; no volver a verte, pero también sabía que no volveríamos a separarnos jamás. Él no se merecía tanto sacrificio pero, ¿qué había de tí? nadie se preocuparía de lo que te quedaba por delante, para el resto de tu vida.
Yo no te he aliviado, yo no lo he impedido, yo no he hecho nada... y me da igual si no hubiese podido hacerlo, o que sería lo más sensato, se seguro que nada de lo que yo hubiera hecho te hubiese devuelto a tu vida media hora antes de que él decidiese, decidiese ser un actor relevante en tu vida. No pude pensar en otra cosa.

Ahora estoy lejos, tan lejos que no me verías ni aunque te empujase, tan lejos que no escucharías mi voz aunque pegase mis labios a tu oreja. No te sirve de nada lo que le hice, no me sirve de nada. Me llevaron lejos e hicieron por mi lo que no pude hacer por tí. No pude pensar en otra cosa.

sábado, 14 de marzo de 2009

cordones y profilácticos

Y quizás te sorpendas sentado en el suelo, de espaldas a la realidad y parapetado por un pequeño muro que te seguirá ocultando mientras no te muevas. Quizás cerrarás los ojos y llenarás tus pulmones de todo el aire que seas capaz de coger, y te sabrá a gloria. Dejarás de oir para escucharte, y serán pensamientos casi olvidados los que te retumben. Quizás no quieras volver a abrir los ojos porque sientas que has llegado a la cima.
Puede que entonces pienses que si vuelves a la realidad y decides levantarte, caigas fulminado al suelo, finiquitando con todo y conservando en la retina los pies de gente ajena a ti, que poco o nada les importas y lejos, obscenamente lejos de alguien al que le conmueva de verdad tu caída.
Es posible... tanto como que en ese momento decidas levantarte y, para tu asombro, no solo no caigas si no que te sientas fuerte, que sientas cierto orden, que te sorprenda una sonrisa en tu corazón y tu cara, que no conozcas a ninguna de las personas que estés viendo, y aún así, sientas respeto mutuo por las mismas. E incluso es probable que quieras caminar un poco más.
Quizás, tan sólo quizás, pues esta no es más que una absurda suposición, tan absurda en su planetamiento como en su verosimilitud, pero tan veraz como los recuerdos, hasta llegar a asentir y negar lo evidente.

Firmé sin preguntar, fuí sin despedirme y volví sin anunciarme, tal y como si nunca hubiese pasado nada...y quizás es que nada pasó.

domingo, 25 de enero de 2009

Ojos, cuidados

Y te miré las nalgas, y vi que las tenías todas.
Y te miré al escote, y vi que me llevaría un rato.
Y te miré a los ojos, y no vi venir la bofetada.

Y te miré las nalgas, y vi que quería seguir viendo.
Y te miré a los ojos, y vi que debía seguir viendo.
Y te miré al escote, y no vi venir la bofetada.

Y te miré a los ojos, y vi lo que quería.
Y te miré al escote, y vi que seguía queriendo.
Y te miré las nalgas, y no vi que te ibas...

Y así, como yo te miré, al venir, al irte, al estar...
como yo te miré, ya no ví nada más.

lunes, 12 de enero de 2009

encendiendo la radio y el cúbito

El día que tu estabas de oferta, yo había olvidado el tabaco en otra chaqueta.
Ese día, tu y yo ya habíamos fumado.

Posiblemente haya elegido un canal erróneo. Posiblemente no me escuche nadie, pero sólo con emitir hoy, habrá más que suficiente.
Soy el único superviviente de un cataclismo que lleva treinta años perpetrándose en mi cabeza día tras día. Una revolución ininterrumpida a la que no ha sobrevivido un gobierno el tiempo suficiente como para que nadie se acuerde de él, tan sólo las imágenes y un nombre que nunca cambiará sirven de referencia al mundo que ha de existir fuera de estos muros, fuera de mi cabeza.
No es esta la primera vez que el silencio reina aqui dentro, que todo parece claro, que todo parece sólido, y es quizás por eso, porque no es la primera vez que pasa, que no me alegro, pero me siento feliz.
En todos los momentos que han sido como este, ha habido una constante, una sensación... algo que me ha hecho recobrar el sentido, que me ha dado razones y motivos, que me ha dado la razón y que me ha alentado a seguir con esta caótica revolución, pues algún día me apoderaré de la sonrisa perpétua, de la constancia del bien, del poder inagotable de seguir, de olvidar un fin, y de ganar al miedo de ganar. En este momento, tan parecido a otros, me convence lo que veo, y estoy convencido de que se puede.
Fin de emisión.

El día que tu estabas de oferta, yo sabía sin saber lo que iba a pasar.
Ese día, tu y yo estábamos pasando

miércoles, 7 de enero de 2009

yo habré la puerta (despropósito imperfecto del verbo hablar)

...y habré de ser Rey. Más allá del presente, y tras el último paso dado como yo, habré de ser Rey. Quedará en la memoria y quizás en el silencio todo lo que anteriormente haya sucedido, pues una vez me corone, tan solo prevalecerá el presente en mi reinado ya que yo, habré de ser Rey. Quien fue una vez bufón, quien fue una vez lacayo, quien fue una vez escudero, quien fue una vez caballero, quien fue una vez lo que hubo de ser, cerrará para siempre un pasado al conronarse, y si bien alguna vez fuí, y sigo siendo, poco queda de ello, porque yo, yo habré de ser Rey.