miércoles, 2 de diciembre de 2009

misivas de conflicto

"Querido Charly:
Te escribo porque creo que esta tarde, en el arrozal, te has excedido un poco. Entiendo que te sientas fastidiado por el hecho de querer matarte. Comprendo que lo mismo estás un poco mosqueado por esta costumbre nuestra de ir quemándote los poblados, arrasando cosechas, animales, mujeres y algún que otro paisano, por confusión. Son cosas que entran dentro de lo comprensible.
Que nos vayámos escondiendo por la selva, y ahora me emboscas tú, que si ahora te pongo yo unas minillas por allá, que sí te disparo, me disparas, te apuñalo, te apedreo... tiene su aquél, lógico y loable por más que a veces pierda encanto y es normal que a veces hasta nos pierda la boca, tanto a tí como a mí, que en eso somos todos culpables.
Por todo eso, me parece normal que a veces te aflore esa mala leche tan tuya, pero lo que no me parece nada normal y bastante feo por tu parte es que te dispare hasta tres veces por la espalda y ni te dignes a girarte ni tan siquiera para decirme hola. Hubiese preferido tres interrogatorios seguidos a tener que toparme con esa tu indiferencia. Fuiste más allá. Y ahora espero que reflexiones sobre lo que te he dicho y no haya una próxima vez.
Enguerradamente tuyo,

Lt. Smith"