martes, 29 de julio de 2008

paro la lira

Madre, que sí, que ya como, y descuide, que no caeré desfallecido por falta de alimento, así que no se me apresure a reponer mis cucharadas, que la conozco.
Madre, que sí, que está bueno el arroz. Sabe usted de sobras que no hace plato que me disguste. No, no pienso repetir, que bastante generosa ha sido con la ración que me ha proporcionado. Si acaso, guárdeme para cuando parta esta tarde, que buena cuenta le echaré de camino a casa.
Madre, que sí, que debo marchar a media tarde, que luego se me antoja interminable si parto con la noche, y mañana al alba he de estar en pie. Que sí, que hace calor..pero bueno, usted no se preocupe que pisaré toda sombra que encuentre. Además, si me apresuro, aún contaré con un par de horas de sueño para mañana por la mañana.
Madre, que no, que no he de darle explicaciones de mis idas y venidas,créame, no son las mías historias para sus oídos. Recuerde la cana que le salió cuando supo de lo mío con la nieta del boticario. Mire que entrar con esa confianza en mi habitación....
Madre, que no, que por muchos años seguiré siendo el benjamín bajo este techo. Comprenda madre que no sería de bien traerle otro presente que no fuesen estos dulces y mis besos,que no soy yo carne para esos estofados.
Madre, que ya se que madre no hay más que una,pero recuerde que usted, a mí, me encontró en la calle

No hay comentarios: